domingo, 3 de julio de 2016

VIVE, RÍE, AMA

La vida siempre sorprende, estoy convencida de eso. Sorprende para bien y de vez en cuando, para no tan bien. 
Todo este cuatrimestre me dediqué a estudiarla pudiendo retomar la licenciatura en Biología que quedó truncada hace algunos años. Todavía me falta mucho, pero sigo en carrera y el esfuerzo de viajar y vivir en dos ciudades está dando sus frutos. Cuanto más estudio, más me asombro y más tomo consciencia de que la vida es imposible, por eso es tan maravillosa y preciada. 


Desde mediados de Junio me sumergí en la vorágine de dar exámenes, pero eso no fue todo y de repente, me encontré transitando por guardias, consultorios, laboratorios y clínicas para tratar de determinar qué tenía mi marido, que por las noches volaba de fiebre.


Me asusté, estudié, me preocupé, rendí exámenes, los abrobé y me seguí preocupando. Mi vida pasó a depender del hígado de mi marido y de los valores de los sucesivos hepatogramas, que empeoraban en lugar de mejorar. Todo sin causa, sin razón aparente entre todas las investigadas. Mientras tanto, defensas muy bajas, una bacteria en la garganta y ahí estamos... Ayer, siempre sin razón esos mismos valores empezaron a mejorar de nuevo dando señales de que el hígado se restablece de ese algo que lo afectó. Así de simple y así de complejo. La vida, más allá de todo, es un gran misterio.


Por eso, tanta ausencia bloguera. Mi vida, quedó dividida en tres ciudades diferentes: en una quedó mi casa, abandonada desde mediados de Junio porque no pudimos volver. En la segunda, en la que estudio están los médicos y las clínicas, de los que por ahora preferimos no alejarnos. Y en la tercera, la ciudad en la que nací, están mis padres a quienes quisiera tener más cerca. Aunque aquí tengo el apoyo de la familia de mi marido.


En medio de todo esto y como para despejar mi cabeza, me compré algunos materiales (porque todos mis elementos de pintar quedaron en mi casa) y me puse a pintar este cuadrito que es para regalar a una señora que nos prestó ayuda. Elegí la frase especialmente porque me parece un bello mensaje: para mí misma mientras pintaba y para regalar a alguien. 




Para ambientar las imágenes utilicé estos tesoros de mi hermano. Un viejo telégrafo y una cámara de fotos antigua. Las fotos... no las saqué con esa cámara aunque así parezca!! La escasa luz de los días siempre nublados y una cámara vieja no me ayudan. Pero bueno, es lo que hay y no quería dejar pasar la oportunidad de volver al blog, compartir mi trabajo y de pasada, hacer un poco de catarsis.




Todo va mejorando de a poco y, para ser sincera, nunca tuve tantas ganas de recuperar la normalidad de la aburrida pero tan querida rutina cotidiana. Seguramente, esto va a pasar pronto y luego de un tiempo nos reiremos recordando todo nada más que como un conjunto de anécdotas de esas que se cosechan viviendo la vida.


7 comentarios:

  1. ¡Me alegro que tu marido este mejor Marita! Muchos ánimos que ya verás como todo pasa.
    El cuadrito y mensaje, bellísimos.
    Besos

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  2. Marita!!!! que bueno que este mejor y ojala vuelva a la normalidad todo pronto!!!!
    El blog es eso, nuestra catarsis, nuestro psicologo virtual, un poquito tambien...aprovechalo!! que importa la calidad de las fotos (que, comentario a parte, son mucho mejores que lasm ias sacadas con mucho esmero pero poco exito!!), lo que realmente importa es eso que nos hace sentir!!
    Besote inmenso y mucha fuerza desde aca!!!

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  3. Marista un cuadro precioso y cuánto transmite.
    Esperamos podáis volver a vuestra rutina cotidiana que tanta falta hace cuando se pierde,será una señal que tu marido está del todo recuperado.
    Muchos ánimos y vuelve pronto.
    Besos de las dos

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  4. Hola! Espero que tu marido se termine de recuperar!!!!
    besito

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  5. Hola Marita !! Si la vida tiene mucho de dulce y de agraz .. Yo me imagino tu vida con la incertidumbre de la salud de tu marido .. Me alegró que todo este mejor y muy lindo ese cuadró sobretodo por esa frase tan alentadora

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  6. Hola marita! Que feo los momentos de incertidumbre, el saber que tu marido se está recuperando te debe dar gran alivio. Pareciera que lo peor ya pasó así que nunca mejor momento para pensar que lo mejor está por venir. Tu cuadro salió lindisimo y lo más importante, estoy segura que te ayudo a poner la cabeza en otro lado aunque fuera por un rato!

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  7. Ufff, Marita... Vaya temporadita... Nos alegramos muchísimo de que tu marido vaya mejorando poquito a poco. Nos ha emocionado tu post, por tu empuje, tu positividad, tu entrega. El que hayas retomado tu carrera de Biología después de años dice muchísimo de tí, y el cuadro con el que has retomado la rutina así lo demuestra. Es una preciosidad y nos recuerda que hay que vivir con intensidad.

    Muchísimos besos de las dos y... vive, rie, ama.

    J&Y

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